Publicidad en los sueños

Warning: Si no ha visto y quiere ver Inception, no lea este post. 

Diálogo

Postiza: Últimamente en las noches antes de dormir, me concentro en weas lindas, para soñar con esas cosas lindas

Joan: ¿Y funciona?

Postiza: A veces

Joan: ¿Pero en qué podría pensar?

Postiza: .... Total, soñar es relativamente gratis

Joan: Hay que aprovechar que aún es gratis, después van a cobrar por soñar. O van a poner publicidad en los sueños

Publicidad en los sueños. Si uno piensa en Inception, si la realidad de Inception se volviera realidad en nuestra vida, claro que podríamos tener publicidad en los sueños. Y claro que podrán cobrar porque por ejemplo, arquitectos diseñarían el mundo de los sueños, habría expertos en niveles de profundidad del sueño, habría preparadores de brebajes para controlar la duración del sueño, habría coordinadores.

Uno podría llegar con un amigo a una "tienda del sueño" y pagar para que le coordinen un sueño de a 2, o grupal. Podríamos ponernos de acuerdo, establecer reglas, por ejemplo, en el sueño atreverse a hacer cosas que en la realidad no nos atrevemos. Todos andarían declarándose en sueños, o golpeando al tipo al que se le tiene ganas hace rato, o robando bancos. 

Uno podría pagar por un sueño ambientado en el lugar que uno quisiera. Inclusive en lugares del mundo que existen. Sí, hoy quiero irme de carrete nocturno en Las Vegas, el domingo me pego un safari en Sudáfrica, una cosa poca. Se crearía también la industria del turismo del sueño. Capaz llegaría a tener los mismos precios del turismo de a de veras. Porque bueh no faltaría el que empezara a confundir el sueño con la realidad. No faltaría el congreso de psicología (la disciplina se podría llamar psicología onírica) en torno a la polémica "Sueño o Realidad; los límites de la experiencia onírica", o el de farmacología "Uso de sustancias químicas en la experiencia onírica; ¿medicina o ética?", el de física "El tiempo onírico y el tiempo real", o el de filosofía "El mundo de las ideas como mundo real; la experiencia onírica según Platón". Me fui en volá.

Ahora me voy a dormir y pensaré en cosas placenteras, a ver si se me aparece un Hugh Jackman o un vampiro -de esos de True Blood- onírico.